Tipos (psicológicos) al volante

EXILIO INTERIOR

twitter: @eugenio_fouz

“Attitude is a little thing that makes a big difference” (WINSTON CHURCHILL)

Estamos en agosto. La gente disfruta sus vacaciones de verano y lo más normal es aprovechar estos días para descansar, dar un giro a la rutina de siempre o viajar. En el caso de que elija viajar por carretera con su propio coche, este artículo puede servirle de ayuda a la hora de ponerse al volante.

Antes de nada, ha de saber que no soy yo el más indicado para dar consejos a nadie sobre cómo conducir adecuadamente. Soy el típico conductor cauto que circula por carretera respetando las normas. Sé que habrá quien me clasifique en el tipo de conductores lentos. Hombre, la verdad es que no hago barbaridades con el acelerador, manejo las luces de intermitencia de forma apropiada y repaso el manual de circulación de vez en cuando. En los viajes largos paro cada dos horas a tomar café y pienso en la salud de mi automóvil. Trato de disfrutar de la aventura con una conducción segura y tranquila. En pocas palabras, mi actitud es la actitud de un conductor fino y bien educado.

Cuando conduzca en agosto, o en cualquier otra época del año, no olvide que hay tantas clases de conductores como tipos psicológicos, con coche o sin coche. Recuerde además que uno manifiesta su personalidad en todos los aspectos de la vida. Por consiguiente, un conductor nervioso responde al tipo de hombre nervioso. Si un tipo nervioso es un peligro en la oficina, imagine el peligro que encierra al volante en la cabina de un turismo. Esta clase de conductor no encuentra la serenidad en ninguna parte. Por lo general, este caballero o señora conduce un vehículo llamativo. El prototipo suele ser un deportivo o un coche potente, de color preferiblemente rojo, aunque también le gusta el negro. Lleva mucha prisa y quiere llegar antes que usted adónde sea. En las autopistas se apropia del carril izquierdo y no lo deja por nada. Otra modalidad dentro de esta clase es la del conductor colibrí que va del carril izquierdo al derecho y del derecho al izquierdo, trabaja las marchas y apura la frenada en las curvas como un piloto de rally (ojo, puede ser un piloto de verdad. Sepa usted que ellos también viajan por carretera).

Encontrará, en el extremo opuesto, al conductor novato clavado a una velocidad fija que entorpece la fluidez del tráfico. Este tipo se caracteriza por su lentitud. A veces hace locuras propias de la falta de experiencia. Para ser objetivos, diremos que el novato es un tipo temporal y transitorio. Siendo justos, además, todos fuimos novatos antes para ser veteranos después.

Otro tipo de conductor es el conductor ideal que conduce bien y con estilo. Este automovilista guarda la distancia de seguridad con los otros vehículos, usa adecuadamente los intermitentes y en la maniobra de adelantamiento siempre vuelve al carril derecho. Acostumbra a ser cortés con los demás, no tiene prisa y va al mando de coches de color blanco o azul marino.

[artículo de opinión publicado en @laverdad_es ; miércoles 12/08/2015]